El futuro de los clubs de pádel

Pero esta situación de continua expansión no es eterna y los clubes van a comenzar su imparable retroceso. Sólo los mejores podrán mantenerse en este competitivo mercado porque saben cuál es el secreto del éxito: mejorar el servicio, aportando calidad a los jugadores y reduciendo los precios para hacerlos más competitivos.

De la escasez a la saturación del mercado, así ha sido la evolución de las pistas de pádel en España. Hace apenas unos años no existían prácticamente ni pistas ni clubs para poder jugar al pádel y la oferta era muy escasa, debido a la mínima demanda que había.

Los pocos jugadores y aficionados se conformaban con las pistas disponibles que existían, que, incluso, en muchas ocasiones, ni siquiera contaban con las dimensiones reglamentarias o tenían los 4 picos de tamaño desigual, se casi la totalidad de pistas eran de muro. La falta de alternativas hacía que los jugadores se adaptaran a la oferta disponible. El problema llegó cuando comenzó a desarrollarse una gran competencia entre los clubes; más tímida, al principio, pero muy notoria, después. Se alcanzó una verdadera saturación del mercado, lo que hace que los jugadores puedan elegir, cómodamente, entre la gran variedad de pistas disponibles.

Retroceso en creación de clubs

Pero esta situación de continua expansión no es eterna y los clubes van a comenzar su imparable retroceso. Sólo los mejores podrán mantenerse en este competitivo mercado porque saben cuál es el secreto del éxito: mejorar el servicio, aportando calidad a los jugadores y reduciendo los precios para hacerlos más competitivos.

Aquí entraría un mayor cuidado de las instalaciones, esto es: ofrecer mejores pistas, mejor superficie o cesped, que exista mayor distancia entre cada una, una mejor iluminación o contar con instalaciones y vestuarios más útiles y completos, disponer de material de pádel para clubs o simplemente tener zona para los socios o personas que son más asiduas al club.

Pero también se puede notar en una mejora del trato al cliente, por parte del personal, así como en contar con grandes profesionales para las clases o mejorar las competencias de los ya existentes.

Los grandes crean sus propios clubs de Pádel

Una estrategia muy acertada es incentivar a los usuarios, mediante encuentros amistosos u organización de torneos que le den mayor notoriedad al club. También se pueden fidelizar con todo tipo de productos o eventos vinculados a este deporte.

Todos estos detalles son los que marcarán la diferencia entre los distintos clubes, por lo que, en poco tiempo, el sector asistirá a un proceso de normalización en el que sólo quedarán los mejores clubes. Es el caso de los centros de pádel de grandes jugadores de la historia, como el Club de Pádel People, de Bebe Auguste, que ofrece una magnífica enseñanza de este deporte en instalaciones modernas y completas, además de formación en todos los niveles y multitud de eventos y torneos, por lo que se postula como el centro especializado en pádel preferido de toda la Comunidad de Madrid. Otro gran jugador que cuenta con su propio club es Belasteguín, Stars Padel, en él es donde se entrena a diario para seguir siendo uno de los grandes jugadores de todo el mundo.

La mejor forma de asegurar el futuro de un club es invertir en calidad y adaptar los precios a los usuarios. Esta será la clave del éxito y quienes no sean capaces de invertir, se verán abocados al cierre.

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